miércoles, 17 de enero de 2007

El mito mundial de los subsidios agrícolas

Uno de los países más exitosos del mundo en la producción y exportación de productos agropecuarios es Nueva Zelanda. ¿Sabe usted cuál es el monto de los subsidios gubernamentales que reciben los productores del campo en Nueva Zelanda? Cero.

En varios estados de la Unión Americana existe la pena de muerte. En muchos de los países islámicos está prohibido el consumo de alcohol y las mujeres no sólo son discriminadas sino que se les obliga a ocultar su rostro. Sería ridículo que alguien esgrimiera estos ejemplos para “argumentar” que en México debemos instaurar la pena de muerte o que en México debe prohibirse la fabricación, la distribución y el consumo de bebidas alcohólicas o que debemos instaurar el uso obligatorio de la “burka” para las mexicanas y prohibirles el ingreso a las universidades.

Así de ridículos son los alegatos de quienes dicen que México debe subsidiar a sus productores agrícolas porque eso mismo hacen los gobiernos de la Unión Europea y de Estados Unidos.

Detrás de ese alegato existe la presunción – totalmente errónea – de que sin subsidios la producción agrícola y pecuaria es inviable. Existe también un reflejo de imitación extra-lógica, de mimetismo bobalicón: “Si lo hacen en Estados Unidos o en Europa debe ser bueno también para nosotros”. (No es “bueno”, ¡es malo!).

Y en el fondo existe la torcida idea – totalmente injusta – de que un grupo de productores (por definición minoritario frente a la totalidad de la población) es más importante que los consumidores y que es correcto, por tanto, que los más – los consumidores y contribuyentes- subsidiemos a los menos.

Esta “sabiduría convencional”, que proclama que los subsidios a los productores agrícolas son necesarios, es desmentida todos los días en todo el mundo con numerosos ejemplos de exitosos productores agrícolas (digamos, quienes cosechan pepinos o tomates en México) que prosperan sin subsidios.

Recomiendo al lector visitar este sitio de Internet:"Farming whitout subsidies? Some lessons from New Zealand", para ver el mejor ejemplo de que no sólo sí hay vida una vez que se eliminan los subsidios, sino que es una mejor vida para todos.

Así, a los defensores oficiales y oficiosos de los cazadores de subsidios agrícolas, les devuelvo su “argumento”: Nueva Zelanda tiene una próspera y competitiva industria agrícola y pecuaria y NO subsidia a los productores del campo, ¿por qué no imitamos mejor a los neozelandeses?

Sólo un dato, de entre el cúmulo de hechos y argumentos que el lector podrá encontrar en el sitio recomendado: La industria láctea neozelandesa es probablemente la más competitiva del mundo, tiene los precios más bajos, exporta leche, mantequilla y otros derivados prácticamente a todo el mundo y, ojo, es más próspera hoy – sin subsidios- que antes con subsidios.

Mañana: Siete razones para detestar los subsidios a los productores agrícolas. Y por qué nos beneficiaría más abolir unilateralmente subsidios y protecciones al campo, que esperar a que otros países lo hagan.

3 Comentarios:

Blogger Paola Escalona dijo...

Muy interesante artículo, con una perspectiva totalmente diferente a la que estamos acostumbrados a escuchar en las aulas mexicanas. Leí el artículo que ud. recomienda, sin embargo, me quedan dudas acerca de si la medida que ud. propone verdaderamente funcionaría en México. Yo no soy economista, pero no me suena muy lógico el que la agriculutura mexicana pueda levantar cabeza totalmente sin subsidios, cuando tenemos a nuestro primer comerciante mucho más competitivo -en este cas engran parte gracias a sus subsidios-. ¿No sería ir demasiado contra la corriente y hundirse en el trayecto? a final de cuentas hablamos de la economía de un país. ¿Ud. verdaderamente cree que esta es una opción para México? Me gustaría tener una opinión suya más extensa al respecto.

enero 17, 2007  
Blogger Wolvh Lórien dijo...

Paola,

si asumimos como cierto que la agricultura en méxico no pudiera levantarse sin subsidios (cosa que lo dudo), sólo puede ser porque es menos costosa la agricultura en otras regiones del mundo, y por lo tanto a los mexicanos les resultaría menos costoso comprar productos agrícolas en el exterior, que producirlos localmente.

¿de qué sirve subsidiar la producción agrícola si a la sociedad mexicana le termina costando más?

Pensá en la economía de una familia, o incluso de un individuo. ¿no sería más costoso para vos ponerte a fabricar todo aquello que usás en tu casa, en lugar de comprarlo a quienes lo venden?

Si aún estuviéramos bajo un sistema de economía familiar, como en el caso de las primeras organizaciones humanas, o el feudalismo, estaríamos en la edad de piedra.

El individuo sale beneficiado de la división social del trabajo, y de la misma manera los distintos países salen beneficiados de la división internacional del trabajo.

Además, dentro del costo de toda actividad productiva, incluida el agro, aparece el precio por los factores de producción involucrados. Los factores de producción bienen a ser el conocimiento técnico, los medios de producción, la mano de obra, los insumos, etc. Si el agro en méxico es costoso, es porque los factores de producción necesarios para desarrollar el agro ya son demandados por otras ramas productivas más rentables. Es decir, si el agro en méxico no es rentable, es porque hay otras actividades económicas en méxico que son más rentables.

Si subsidiás el agro, lo que hacés es desviar recursos desde actividades económicas más rentables hacia las menos rentables, y eso es perjudicial para la economía. Promovés el agro en perjuicio de otras producciones. Y además eleva el costo de vida de todos los mexicanos, salvo tal vez el de los productores subsidiados.

En resumen, dudo mucho que sin subsidios no se pueda levantar el agro en méxico. Pero aunque así fuera, no sería nada malo.

El problema es cuando, con los argumentos económicos se mezclan argumentos ideológicos tales como el nacionalismo (como por ejemplo, elevar a bandera nacional el desarrollo de la agricultura)

enero 18, 2007  
Anonymous Anónimo dijo...

Algo más en relación con tus excelentes artículos es el efecto que los subsidios tienen sobre la distribución del ingreso en México.
Los productores con excedentes, los de Sinaloa, Sonora, el Bajío y algo Tamaulipas y el Estado de México son por lo general los agricultores prósperos, no son campesinos, algunos riquísimos, que tienen la capacidad de reconvertir su producción de llegar a desaparecer los subsidios. Los campesinos auténticos, por contra, los de parcelas pequeñas que trabajan parcialmente como albañiles y que reciben dinero de sus hijas que trabajan de sirvientas para subsistir, esos, tienen que comprar el maíz que les falta. Gracias a los subsidios que mantienen precios y a las restricciones a la importación, pagan precios elevados para financiar su faltante de producción. ¿a quién benefician los subsidios? A los agricultores organizados disfrazados de representantes de los campesinos, agazapados en organizaciones como El Campo no Aguanta Más, la CNC y otras.

enero 19, 2007  

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